¿Qué Hablas?

Idiomas

18 de junho de 2013

Es Mejor Ser 2 que 1

Esta historia fue la segunda idea que tuve para mi blog, pero cada vez me planeaba a escribirla otra idea venía, otra historia y nunca la escribía. Creo que Dios lo hizo a propósito para que yo pudiera escribir con más convicción, porque hace unos meses experimenté algo muy especial.

Estoy casi segura de que al leer el título pensaste que escribiría algo acerca de mi matrimonio, ¡pero voy a hablar de amistad! Me gusta usar este versículo en Eclesiastés 4:9-12 para hablar sobre amistad: Más valen dos que uno, porque obtienen más fruto de su esfuerzo. Si caen, el uno levanta al otro. ¡Ay del que cae y no tiene quien lo levante! Si dos se acuestan juntos, entrarán en calor; uno solo ¿cómo va a calentarse? Uno solo puede ser vencido, pero dos pueden resistir. ¡La cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente! Por supuesto que nuestro mayor y mejor amigo debe ser Jesús, porque Él es el único que no nos defrauda, porque Él es perfecto y justo. Elegir ser amigo de Dios es lo mejor que podemos hacer. Es una decisión que no trae arrepentimiento, ni frustración. Sin embargo, nuestro Creador nos enseña en Su Palabra que no fuimos hechos para vivir solos, hay muchos versículos importantes que afirman la necesidad de compartir tiempo con los demás.


La persona más cercana a mí a quién cuento todos mis problemas, a quién pido consejos y divido todo,  es mi marido, nuestra amistad es algo muy especial para mí, ya que en realidad ella existe. Pero también sé que necesito compartir tiempo con otras personas para que ellas me ayuden a caminar y me corrijan cuando sea necesario.

Pero vamos a empezar del inicio, ¿no?

Yo fui una niña muy tímida, era muy retraída y me aislaba un montón de los otros niños, se buscaba compañía, buscaba estar cerca de un adulto. Recuerdo muy claramente que no tenía ningún amiguito, jugaba sola en el recreo y casi no hablaba. Mi profesora incluso llamó a mi madre para decirle que estaba preocupada, que era una muy buena estudiante, pero no me relacionaba con nadie en la escuela y si yo me acercaba a alguien era a ella. No sé por qué actuaba así y no tuve ninguna amiga hasta el quinto grado de primaria, ahí ya tenía unos 11 o 12 años. Recuerdo cada persona que llamé de amigo. En cada etapa de mi vida, después de esta primera amiga, conocí personas muy especiales. Con cada una viví buenos y malos momentos, hicimos cosas buenas y cosas malas, disfrutamos de lo que para mí era "vivir la vida". Pero yo tenía una idea equivocada acerca de la amistad. Pensé que la gente siempre tenía que adaptarse a mí y no yo a ellas, quería tener buenos amigos, pero no entendía que tenía que ser una buena amiga también. Tuve varios amigos (varones) también. Amistad de verdad, de estas que incluso cuando las circunstancias nos separan, ya que él tenía que ir a vivir a otro estado (y eso pasó más de una vez) pasamos meses intercambiando correspondencia y manteniendo contacto. Con el facebook todo se hizo más fácil.

Para mí todo tuvo un cambio significativo en lo que es ser y tener amigos cuando terminé la secundaria. En mis últimos tres años de escuela hice buenas amistades que duran hasta hoy, y fue también durante este período que conocí a Érico, fue un momento muy importante de mi vida, pero cuando estos mágicos tres años llegaron a su fin, los cambios inevitables de la vida llegan. Al finalizar esta etapa de la vida se crea nuevas expectativas de cómo será la universidad, cómo serán mis nuevos compañeros y tantas otras cuestiones. La separación es casi inevitable. En este mismo período, Dios me pidió otro gran cambio. Asistía y servía a Dios en la iglesia donde estaba mi familia, he estado allí desde mi infancia. Pero el Señor tenía otros planes para mí y me mostró claramente que debería cambiar de iglesia. Yo sabía que sería muy difícil de la gente creer que eso era algo que venía de Dios porque era la iglesia que era Érico estaba y todo el mundo, incluyendo a mi madre, pensaba que este deseo provenía de mi corazón y no algo que en realidad era dirigido por Dios. Incluso yo dudé. Hice un propósito con mi madre, de que por un mes las dos oraríamos por este tema y veríamos lo que Dios nos diría por separado. Si ella me dijera que NO yo me quedaría donde estaba. Un mes más tarde, sentí el mismo llamado de cambio, faltaba ver si mi madre había escuchado lo mismo Dios. Me dijo que se dio cuenta de que era la voluntad de Dios y me dio su bendición para irme. ¡Qué alivio sentí! Este cambio fue importante porque fue en esta iglesia que recibí todo mi entrenamiento y preparación para ser misionera. Por supuesto, en ese momento yo no pensaba que esa era la razón, pero me alegré por la oportunidad de crecimiento espiritual, de nuevas oportunidades para servir y para aprender más de Dios y del programa de jóvenes que tiene allí. Pero no seamos ingenuos, todo cambio provoca un enorme estrés. Además de sufrir la presión de ingresar a la universidad, tenía la distancia de los amigos del colegio, el cambio de trabajo, y también el cambio de iglesia. ¡La tensión era grande! En ese momento yo ya tenía unos 20 años, y volví a vivir durante más de un año esta etapa de mi infancia de no tener amigos, Érico era la única persona con la que hablaba por más de 5 minutos. Érico estaba un poco preocupado sobre ese tema y me motivó a hacer nuevas amigas, pero yo, la timidez en persona, la isla humana, no tuve el valor para tomar iniciativas. Entonces me dijo algo especial: ¿Por qué no oras y pídele a Dios que te dé buenas amigas?
                            
Me di cuenta de que en mis muchos años de cristiana nunca había hecho tal oración. Nunca había pedido a Dios que me diera amigos, pedía por los que consideraba amigos, pero es diferente orar y pedirle a Dios que elija a tus amigos. La verdad es que pensé, ¿por qué no pensé en eso antes? ¡Por supuesto que hice la oración! Pero Érico también me advirtió que yo debería estar atenta a las respuestas de Dios y que debería buscar personas madura de la fe para acercarme. Él siempre me dijo que me acercara a su líder de ministerio. ¡Pero no me atreví! Lo que hice fue ofrecerme a ayudar cuando tenía algo de tiempo libre. Hasta que un día que ya no podía soportar la soledad de no tener amigos sinceros con quien pudiera contar aproveché una oportunidad para hablar con ella cuando ella se acercó a mí para darme las gracias por la ayuda que a veces yo daba al ministerio y de frente le pedí que fuéramos amigas. Ella sonrió, me abrazó y me dijo que sería un gusto. Pero yo pensé que era sólo simpatía y no puse mucha fe. Hablamos un par de veces después de eso, pero nada demasiado profundo... ¡Seguí orando y pidiendo verdaderos amigos de Dios! Con la ayuda de Érico Dios me hizo comprender algunas cosas. Primero que debía salir de mi cueva y tomar la iniciativa para ser más amable y no sentarme a esperar que la gente naturalmente simpatizara conmigo. Segundo, que yo debería dar más de mí misma para profundizar las relaciones. Y en tercer lugar que debería permitir que el Espíritu de Dios cambiara algunas cosas en mí para ser una persona más agradable. Me tomé unos meses para digerirlo todo. Érico siempre hablaba con mucho cariño y admiración de su líder, que sería una amiga perfecta para mí, me haría más como Jesús, etc, etc, etc ....

Para los últimos meses del año, la iglesia siempre se prepara para la obra de Navidad, pero este año, el 2004 sería diferente, no tendría la obra, pero cada ministerio tenía que preparar algo y se haría el Mes del Arte Cristiano. Recibí de la líder del ministerio de pantomima (era la ex líder de Érico) la invitación a participar de la obra. Acepté así de frente y vi ahí la oportunidad de poner en práctica todas las enseñanzas que Dios me había dado en respuesta a mi oración. Eso me cambió la vida, Dios abrió todas las puertas para acercarnos y construir confianza entre nosotras. Descubrí la importancia de buscar en Dios amistades sinceras y de acuerdo con Su voluntad. El siguiente año fue el año en que nuestro pastor de jóvenes nos invitó al entrenamiento del liderazgo, y ella y yo participaríamos del mismo ministerio. A través de ella conocí a otra gran amiga y de ahí nació una amistad que vino del corazón de Dios.
                            Me emociona recordar todo lo que vivimos juntas. Fue algo que generó un marco en mi vida, cambió mi visión de mí misma. Nos reuníamos todos los viernes en la casa de una de nosotras para hacer estudios bíblicos, tiempos de oración y por supuesto cosas chicas. Era el mejor día de la semana, lo más esperado. Con amor siempre nos apoyamos y exhortamos. Teníamos lo cuidado y la sabiduría de manejar nuestro tiempo juntas y de estar con otras personas. Recuerdo algo que hacíamos a menudo, era la oración de Daniel, cada una hacia tres peticiones para orar en la próxima semana, separábamos diferente horas del día para orar por cada petición una de las otras. ¡Era increíble!, en una o dos semanas contábamos los testimonios de las respuestas de Dios a nuestras oraciones. Confesábamos nuestros pecados unas a otras y rendíamos cuentas constantemente hasta vencer la tentación. Dios era el centro y su palabra era siempre la base de la forma en que llevamos nuestra amistad. Cuando peleábamos (por supuesto que nos pasaba, no somos perfectas) hacíamos todo lo posible para restaurar nuestra amistad, pues era algo muy valioso para nosotras. Oramos juntas por nuestros futuros maridos y por nuestros ministerios y compartíamos los mismos sueños al respecto. Yo fui la primera en casarme del grupo. Al principio ese cambio fue difícil porque ellas querían que yo me involucrara en el mundo de los casados ​​y yo no sabía cómo ser una mujer casada, jajajajaja ... la adaptación fue difícil, pero dos años más tarde Dios escuchó nuestras oraciones, y las dos se casaron ... y decidieron que sería en el mismo mes yo para recordarnos y celebrar juntas la fidelidad de Dios para con nosotras. Dios respondió a nuestras oraciones y dirigió cada una al ministerio que Él había puesto en nuestros corazones. Una de ellas continúa en nuestra ciudad, pero en una iglesia hija apoyando junto a su esposo el ministerio de adolescentes. La otra Dios envió a otro estado de Brasil para servir a Dios junto a su marido en otra iglesia hija. Y yo estoy en otro país como misionera para servir a Dios y comenzar un nuevo trabajo. Nos separamos en el físico, pero nuestras experiencias juntas fueron tan importantes que nos unen hasta hoy. En septiembre de 2012 se realizó una conferencia en nuestra iglesia en Manaus, en el segundo día del evento nos encontramos después de más de tres años sin vernos. Fue este encuentro que creo que Dios estaba separando para que yo escribiera esta historia con más propiedad. Era como si nunca nos hubiéramos separado, la misma confianza, el mismo amor, la misma admiración, el mismo propósito. Fue muy especial pasar este tiempo con ellas y averiguar que lo que Dios une el hombre no puede separar, y Dios ha unido nuestros corazones a cultivar esa amistad que el tiempo y la distancia no pueden destruir. Nos dimos cuenta de que Dios contestó todas las oraciones que hicimos cuando todavía éramos solteras, cada una está exactamente en el lugar que soñamos  hace ocho años. Yo las amo y siempre les digo que mis hijos van a saber de ellas y ruego para que ellos tengan amistades verdaderas y sinceras, y aprendan a confiar en Dios para escoger a sus amigos.
                            
Después de que vives una experiencia como esta se aprende mucho y decidí dejar que Dios elija siempre a mis amigos... dejé que Dios hiciera los cambios necesarios en mi carácter para ser una persona más agradable y fácil de amar. Mi marido dice que soy una amiga incondicional, no me preocupo por las fallas que un amigo pueda cometer conmigo, decido seguir amando y esforzándome para vivir en paz. Como sé que el amor es una decisión y mi patrón de amor es el amor de Dios (que es incondicional) elijo amar a mis amigos lo más que puedo, aunque no reciba lo mismo. No voy a decir que sólo tengo 2 buenas amigas, ellas me enseñaron a ser una buena amiga y hacer buenos amigos. Hay personas que estoy convencida de que llegaron a mi vida como una respuesta a mis oraciones (sigo haciendo esta oración) para tener amigos conforme el corazón de Dios. Cada uno llegó, llega y llegará a su tiempo para ser usado por Dios para moldearme, porque... “El hierro se afila con el hierro, y el hombre en el trato con el hombre”. (Proverbios 27:17). Mi círculo de amigos no está completo, ya que en cada etapa y en cada momento de mi vida Dios usa a personas distintas para que me ayuden, me confronten y  me amen. Y sé que todos serán inolvidables y especiales, que el tiempo y la distancia no van a destruir.
                            
Te reto a hacer esta oración. Dejes que Dios elija a tus amistades e incluso si las circunstancias lo separan el amor siempre existirá y las experiencias que vivieron con Dios serán un punto de referencia y un altar de adoración a Dios en sus vidas. Eso para mí es amistad, altares de adoración a Dios, la celebración de su fidelidad y amor, son oportunidades para vivir bíblicamente, para bendecir y ser bendecidos, es un bello nivel de amor y entrega. Yo no lo cambiaría por nada y estoy agradecida a Dios por mis amigas hermanas, las amo de verdad y trato de expresarlo siempre que puedo, orando por ellas y demostrando siempre que sea posible.

Vea lo que la Escritura dice en Lucas 16:9 - Por eso les digo que se valgan de las riquezas mundanas para ganar amigos, a fin de que cuando éstas se acaben haya quienes los reciban a ustedes en las viviendas eternas.

Los amigos son regalos de Dios, son joyas preciosas. Sólo Dios conoce nuestros corazones y nuestras necesidades, por lo que sólo Él sabe las personas que podrán ser el papel de lija y el conforto que necesitas en esta etapa de tu vida. Permita que Él, que es perfecto, hacer lo que es mejor para ti y en ti por su Espíritu y por personas utilizadas por Él.



15 de junho de 2013

O Gênio da Lâmpada

É engraçada a forma como algumas pessoas veem a Deus. Há muitos anos eu li um artigo em uma revista da Escola Bíblica Dominical que falava sobre isso (bota anos aí..rsrsrsrs). Por esses dias mesmo fazendo um aconselhamento eu perguntei a uma jovem como ela via a Deus, ela me contou uma larga história, mas não respondeu minha pergunta. A Bíblia nos ensina várias características de Deus: amoroso, salvador, pai, amigo, vingador, justo, paciente, perdoador, e por aí vai. A verdade é que muitas vezes pensamos em Deus com essas características, mas o buscamos com outras intenções. Vou me fazer entender contando uma experiência, a final de contas o nome do Blog é Experiências com Deus.

O ano era 2010, o mês, fevereiro. Meu esposo planejou uma viajem de férias com alguns amigos para conhecermos três países da América Latina. O Chile, a Argentina e o Uruguai. Foram meses planejando, estávamos todos contentes, ansiosos e com espírito aventureiro.

Esse aí era o nosso grupo, éramos cinco no total.

Esse ano foi um ano diferente pra gente. No inicio do ano ganhamos uma viajem ao nordeste brasileiro. Conhecemos várias cidades. Durante a viagem recebemos uma chamada de Manaus para informar-nos que já não estaríamos mais no ministério de jovens (ministério que estivemos por seis anos) e sim que iniciaríamos uma nova igreja em outro bairro de Manaus. Foi uma enorme surpresa, mas aceitamos o desafio. Como essa viajem pela América Latina já estava planejada decidimos não cancelar mesmo com uma mudança tão significativa na nossa vida. Deus já tem nossos dias todos escritos e essa viagem nos reservava uma prova de fé que mudaria a vida de todos nós. Hoje vejo essa experiência e creio que fomos privilegiados, mas nem sempre pensei assim e é aí que o título deste poste começa a fazer sentido.

Nossa primeira parada foi Santiago do Chile, passamos uns cinco dias aí, foram dias tranquilos. Santiago é uma cidade encantadora, pra ser sincera é uma das cidades mais bonitas que já conheci. No último dia lá fomos a um parque de diversões. Foi um dia estupendo!


Daí nos dirigimos a uma outra cidade do Chile. É uma cidade bem pequena, sem shoppings, cinemas, nem nada disso, mas cheia de beleza natural, eu até falei que queria morar lá. A cidade se chama Pucón. Um lugar que fica ao pé de um vulcão ativo. Vulcão esse que escalamos... quer dizer... todos escalaram, menos eu! Como estava bem gordinha, meu físico não suportou o esforço, me senti mal e voltei ao hotel. Fiquei arrasada quando depois me disseram que duas crianças foram até o topo. QUE VERGONHA PARA MIM!!!!


Nesse dia da escalada eu pensei que meu esposo tinha ficado chateado comigo porque pagamos pelo passeio e por eu ter desistido não nos devolveram o dinheiro, mas a verdade é que ele disse que tudo fez ele ter várias ideias para suas mensagens. E para me consolar me convidou para jantar sem o grupo. Fomos a um restaurante muito simpático e lembro-me que comemos salmão ao óleo. Uma delícia! Em frente ao restaurante tinha uma igreja batista bem pequenininha. Decidimos que depois do jantar iriamos ver se havia alguma programação. Quando chegamos havia somente um senhor aí, entramos e falamos por um bom tempo com ele. Ele era um dos fundadores da igreja, disse que já quase não tinham programações porque não havia pastores que quisessem ficar ali já que o salário era pouco. Compartimos com ele o desejo que tínhamos de fazer missões em países hispano hablantes. Ele chorou e disse que aquele lugar necessitava de pessoas dispostas a servir a Deus por amor e não por dinheiro. Foi um momento chocante para nós. Saímos daí cheios de esperanças. Infelizmente esse era nosso último dia aí nessa cidade, já tínhamos nossas passagens para Bariloche compradas para a manhã seguinte. Decidimos orar e falar com nosso pastor sobre a ideia quando chegássemos a Manaus, mas o que aconteceu na madrugada desse dia mudou meu coração e minha visão sobre Deus e sobre mim mesma!

Na madrugada do dia 27 de fevereiro as três da manhã houve um terremoto de 8.9 na escala Richter. Nós estávamos a 300 km do epicentro. Foi HORRÍVEL! No Brasil não tem terremotos então não sabíamos como reagir ou o que pensar. Como foi de madrugada, estávamos dormindo e despertamos com o movimento. Nossa cama ia de um lado a outro com muita velocidade. Foram os dois minutos mais aterradores da minha vida, pareceram dois anos. Saímos desesperados a entrada da pousada que estávamos, a porta estava emperrada e ninguém podia sair. Todos gritavam, as crianças choravam desesperadas, uma mulher repetia em voz alta: -“Eu não quero morrer, eu não quero morrer”.  Todos estavam muito nervosos. Tivemos que quebrar a porta de vidro para poder sair. Saímos e a boca do vulcão estava vermelha, cheia de fumaça. Um homem saiu gritando pela rua: - “Todos vamos morrer, o vulcão vai explodir!” Só quem estava aí ou já passou por uma situação assim sabe como é terrível. Ficamos na rua (com roupa de dormir) o resto da madrugada e sem muita orientação do que podiamos fazer. Eu entrei em pânico, não podia acreditar que isso estava acontecendo comigo, uma filha de Deus!

     
                                                                                Algumas imagens

Eu pensava muito na minha mãe, eu achava que iria morrer e queria ter dito a ela que a amava e um montão de coisas mais. Você sabe o que é entrar em pânico? Era assim que eu estava! Eu só chorava. Entramos no hotel juntamos nossas coisas e fomos para o terraporto da cidade, pois nosso ônibus sairia cedo pela manhã. Nesse intervalo de tempo sentimos várias replicas do terremoto o que deixava tudo mais tenso. O vulcão parecia que entraria em erupção a qualquer momento. Quando amanheceu nos avisaram que nenhum ônibus sairia nos próximos dias porque as estradas estavam destruídas. Que? O que eu mais queria era ir embora e não tinha nada que me tirasse daí? Até esse momento não tínhamos uma noção completa de tudo porque apesar de todo estresse em Pucón, não teve mortos nem feridos graves. O que sim passou foi que os supermercados fecharam pela desordem das coisas e as lojas não se abriram com medo de serem saqueadas. Algumas famílias abandonaram a cidade. Poucos restaurantes funcionavam porque não havia gás, nem luz elétrica. No Chile o gás é encanado e eles cortam tudo para não haver acidentes. Não havia internet, nem nada. Estávamos em uma ilha. Quando a fome nos venceu saímos para buscar um lugar aberto para comer, encontramos um restaurante, mas a comida demorava umas 2 horas porque faziam a lenha já que não tinha gás. Aí esperando houve outra réplica e uns homens da mesa ao lado usaram a situação para comentar-nos que em Santiago já haviam sido registradas mais de 700 mortes. Puxa, aí paramos para imaginar que nossas famílias estariam desesperadas sem saber notícias. Bom, resumindo, às quatro da tarde a empresa decidiu que sairia um ônibus para uma cidadezinha próxima de Pucón, não pensamos duas vezes e subimos para tentar sair do Chile e chegar na Argentina. Durante esse caminho vimos muitos carros capotados, pontes partidas ao meio, ruas abertas. Eu estava destroçada, decepcionada com Deus. Eu pensava que Ele não havia sido justo comigo por permitir que eu, uma serva fiel, dedicada e apaixonada pelo meu ministério sofresse com uma situação assim. Meu cérebro brigava com meu coração, minha razão e minha emoção entraram em conflito! Tudo o que eu pensava de bom de Deus foi pelo ralo em questão de segundos. Sim isso me passou! E justo quando havíamos pensado em ir servir a Ele ali naquela cidade. E eu imatura, pensei: Que falta de consideração Deus!

Uns dias antes da viagem (no feriado de carnaval) participamos do Acampamento de jovens da igreja que tinha como tema “VIDA RADICAL” – VIVER É CRISTO, MORRER É LUCRO. Falava de viver para Deus sem medo de ir contra o mundo. O pastor nos havia convidado para dar um testemunho de servir a Deus com intensidade e amor. Dei meu testemunho cheia de convicção! No final uma jovem veio me dizer que admirava minha fé e meu amor a Deus e que queria alcançar o mesmo. Eu sentia que tinha uma fé INABALÁVEL! Como eu era boba!

Viajando naquele ônibus em direção aquela outra cidade, todo o acampamento vinha a minha memória, cada mensagem, cada decisão. E foi aí que em meio a todo esse conflito emocional e espiritual, eu descobri que era uma fraude! Quero registrar que a postura do meu esposo foi oposta a minha, ele via o amor e cuidado de Deus em tudo, eu só via o abandono e a desconsideração. Os outros viajantes do grupo tiveram reações distintas também, cada um teve em seu coração as confrontações e certezas que particularmente cada um necessitava, eu só posso falar por mim.

Eu me sentia defraudada com Deus, e sentia que minha fé era uma fraude. Anos e anos declarando que o viver é Cristo e o MORRER é lucro. No viver, estava tudo bacana, mas na hora de provar o morrer eu falhei com Deus. O pior é que meu desespero era tanto que eu achava o contrário, que Ele havia falhado comigo. Eu entrei em uma guerra! Eu de verdade pensava que porque eu fazia tudo certinho não era justo que algo assim me passasse que eu corresse esse tipo de perigo. Me dá vergonha confessar isso, mas acho necessário para ensinar o que teve que mudar em mim e no meu caráter para entender que Deus não é o Gênio da Lâmpada. Ele não está aí como ser um mágico e místico para realizar todos os meus desejos e fazer tudo o que eu quero. E eu não queria ter passado por esse sufoco!

Quantas vezes, sem querer mesmo, tratamos a Deus como um amuleto da sorte? Pensamos que porque o servimos, meditamos em Sua Palavra e etc, etc, e etc.... temos que ser imunes ao sofrimento e as decepções. Com a teoria da prosperidade que está invadindo as igrejas, essa ideia de Deus “Gênio da Lâmpada” e Jesus “amuleto da sorte” trocamos de lugar as coisas e os valores bíblicos. Nos colocamos como os “reis deste mundo” e o Senhor como nosso serviçal. Não, eu não me esqueci de Romanos 8:17 – “Se somos filhos, então somos herdeiros de Deus e coerdeiros com Cristo”. Também não me esqueci de Josué 1:8 – “Não deixe de falar as palavras deste Livro da Lei e de meditar nelas de dia e de noite, para que você cumpra fielmente tudo o que nele está escrito. Só então seus caminhos prosperarão e você será bem sucedido”. E de muitos outros versículos que falam de prosperar e ser abençoado, o que não fazemos é dar-nos o trabalho de estudar o contexto de todos estes versículos e de não entender de verdade o que é ser próspero. Vamos começar? Esse ensinamento me foi difícil aprender, tive que passar por um desastre natural para aprender onde estava de verdade meu falho coração e quem é Deus.

Se analisamos primeiro Romanos 8 nos daremos conta que do versículo 1 até o 17 fala de viver pelo Espírito. Já não somos mais escravos do pecado e sim guiados pelo Espirito Santo, e se vivemos conforme o Espírito provamos que somos filhos de Deus e se somos filhos, somos herdeiros. Mas a resposta de todo esse mistério está na continuação do versículo 17 e no restante deste fabuloso capítulo. Confere aí:

(v.17) – Se somos filhos, então somos herdeiros de Deus e coerdeiros com Cristo, se de fato participamos dos seus sofrimentos, para que também participemos da sua glória.

(v.18) – “Considero que os nossos sofrimentos atuais não podem ser comparados com a glória que em nós será revelada”.

Mais claro que água! Essa herança por receber não será aqui nesta vida, será na Eternidade. Se você tira um tempinho para ler todo esse capítulo (faça isso agora se quiser) vai notar que é um encorajamento a suportar as dificuldades deste mundo para receber como herança a glória como filhos de Deus.

O livro de Josué tem como contexto a morte do líder do povo de Israel, Moisés, e o chamado de Deus a Josué de continuar essa liderança. Imagina a situação de Josué, substituir ninguém mais ninguém menos que Moisés, o amigo íntimo de Deus. Ele se sentia impotente e temeroso, o que particularmente considero normal diante das circunstâncias. O próprio Deus encoraja o fiel pupilo de Moisés a ser forte e corajoso, que Ele o acompanharia como fez com Moisés. Dá a ele as instruções: “Não se aparte deste Livro da Lei, medita nele o tempo todo e tudo te irá bem”. Opa! Então quer dizer que tudo seria paz e tranquilidade agora para o povo de Israel? Moisés sofreu todas as pragas do Egito e Josué ficaria com a parte tranquila da história? DE JEITO NENHUM! O desafio deste novo líder era levar o povo escolhido a conquistar a terra prometida, que não estava de bombeira lá, só esperando os israelitas chegarem. Era uma terra boa, que abundava leite e mel, tu achas mesmo que estava desabitada? Eles teriam que lutar contra vários povos bem armados para alcançar a tão sonhada terra. A liderança de Josué foi baseada em muitas guerras e batalhas, não foi esse mar de rosas não.

Ser próspero não é sinônimo de ter muito dinheiro e não passar dificuldades. Ui, nada que ver! As benções que Deus nos promete como filhos obedientes a Seus estatutos são superiores ao dinheiro e a ausência de problemas. É a paz que o dinheiro não compra, é a esperança que só os problemas nos fazem enxergar, é a segurança de que o melhor para nós não se compara ao que se pode ter aqui. É a garantia de viver eternamente na presença de Deus. É uma alegria constante que as circunstâncias não explicam. É a convicção de que os propósitos do Senhor são justos e bons.
Ser próspero é ser contente, satisfeito com o que eu tenho, é desfrutar com plena alegria tudo o que eu possuo, é gozar da presença de Deus em minha vida, é experimentar a boa, a agradável e perfeita vontade de Deus. Ser próspero é poder refugiar-me em Deus em momentos de angustia, é saber que o choro pode durar uma noite, mas a alegria virá pela manhã, é confiar que tudo, absolutamente tudo coopera para o meu bem, é ter a segurança que a morte não é o fim de tudo. Ser abençoado é ter amigos sinceros, uma família unida, é ter livre acesso a Deus em oração, é saber que o Senhor escuta e responde quando eu clamo, é ter a confiança que a minha dívida com o pecado já foi paga na cruz, é saber e sentir que ainda que não tenha ninguém ao meu lado, nunca estarei sozinha. É saber que existem anjos com ordem de me guardar, é ter a convicção que nenhuma prova é maior que eu, que nenhuma tentação é invencível. Ser abençoado é não precisar mais ser escravo do pecado, é experimentar a liberdade de escolher ser escravo de Deus. É conhecer o que é o amor e um montão de coisas mais. E nada disso tem haver com ter dinheiro ou ausência de sofrimento.

A Bíblia conta a história de Jó. Todo mundo já escutou falar dele. Todos lhe admiram por sua grande paciência, mas há muito mais sobre Jó que só uma lida rápida não nos permite aprender. Eu já li esse livro muitas vezes, desde que cheguei ao Perú acho que foram umas três e sempre aprendendo algo novo. Ele foi um homem fantástico! A Narrativa de sua vida diz que ele era um homem muito próspero, diz que ele tinha muitos bens, muitos filhos, muitos criados, muito dinheiro e que era um dos homens mais respeitados de sua época. O que me chama atenção em sua história além de todo esse conforto e vida de rei que ele tinha é que no primeiro versículo, do primeiro capítulo do livro que tem como título o seu nome diz que ele era um homem reto e incorrigível, temente a Deus e que vivia longe do mal.

Jó 1:1 - Na terra de Uz vivia um homem chamado Jó. Era homem íntegro e justo; temia a Deus e evitava fazer o mal.

ANTES DE FALAR O QUE ELE TINHA, A BÍBLIA REGISTRA COMO ELE ERA! 

O versículo cinco diz que ele chamava seus filhos para que se purificassem diante de Deus sempre que terminavam de dar uma festa para não estar em pecado. Ele tinha medo que Seus filhos maldissessem a Deus em seus corações.

Jó 1: 5 - Terminado um período de banquetes, Jó mandava chamá-los e fazia com que se purificassem. De madrugada ele oferecia um holocausto em favor de cada um deles, pois pensava: “Talvez os meus filhos tenham, lá no íntimo, pecado e amaldiçoado a Deus”. Essa era a prática constante de Jó.

O que ele era e fazia por temor e amor a Deus era mais importante do que suas posses.

Quando Satanás se apresenta a Deus para prestar contas com Ele junto com os anjos algo importante para compreender essa história acontece. (Esta semana estudamos o livro de Jó no grupo de estudos que temos em nossa casa e meu esposo nos ensinou algo bem interessante que eu nunca tinha notado. Por que Satanás foi juntamente com os anjos apresentar-se diante de Deus? Porque ele também é um anjo, um anjo caído, mas um anjo, por isso estava lá.... Era só uma curiosidade bíblica). Voltando ao assunto... Deus pergunta a Satanás se ele já havia notado a boa conduta de Seu servo Jó, veja a descrição que o próprio Deus faz dele:
Jó 1:8 - “Reparou em meu servo Jó? Não há ninguém na terra como ele, irrepreensível, íntegro, homem que teme a Deus e evita o mal”.
Jó 1: 9-12 - “Será que Jó não tem razões para temer a Deus?”, respondeu Satanás. Acaso não puseste uma cerca em volta dele, da família dele e de tudo o que ele possui? Tu mesmo tens abençoado tudo o que ele faz, de modo que os seus rebanhos estão espalhados por toda a terra. Mas estende a tua mão e fere tudo o que ele tem, e com certeza ele te amaldiçoará na tua face. O Senhor disse a Satanás: “Pois bem, tudo o que ele possui está nas suas mãos; apenas não toque nele”. Então Satanás saiu da presença do Senhor.

O grande desafio de Jó agora era outro. Talvez antes ele lutasse por manter puro seu coração para não pensar que suas posses eram frutos de todo seu esforço. Claro que isso conta, mas quem dá a forca, a saúde e as condições para que uma pessoa trabalhe? DEUS! Agora Jó se enfrentava com algo novo, amar a Deus pelo o que Ele é e não pelas coisas que Ele podia dar-lhe. Você consegue ver onde se encaixa aqui o título deste post? Claro que é muito mais fácil servir e amar a Deus quando as coisas nos vão muito bem, mas e quando tudo parece o fim?

Tem gente que mantem a sua esperança em Deus para encontrar um esposo ou esposa, mas quando é vencido pelo tempo abandona a Deus e se envolve com um não cristão, ou então não quer colocar um freio na sua paixão e abandona tudo em nome do seu “amor proibido”. Ou então depois de tantos anos sendo uma pessoa honesta quando já se sente cansado de “ser pobre” chuta o pau da barraca e se envolve em um negócio milionário, mas desonesto. E tem tantos e tantos outros exemplos. Tenho certeza que você conhece ou já ouviu falar de histórias assim. Infelizmente me vem mais de um nome na memória. E pensar que eu quase entrei para esse time por pensar que nenhum mal podia me atingir.

DEUS NÃO ESTÁ AÍ PARA REALIZAR NOSSOS DESEJOS, NÓS É QUE ESTAMOS AQUI PARA REALIZAR SUA VONTADE.

Em sua Palavra há uma condição para ter os desejos do nosso coração realizados, agradar-se, deleitar-se nEle.
Salmo 37: 4 - Deleite-se no Senhor, e ele atenderá aos desejos do seu coração.
Deleitar é dar muito prazer, possuir uma posição de contentamento. É necessário que minha vida agrade a Deus e que eu esteja satisfeita com TUDO o que Ele me proporciona.

Se seguimos com a história de Jó, vemos que mesmo sem compreender o motivo de tantas calamidades em sua vida ele não deixou de amar e nem de confiar em Deus.
O Senhor sabia qual seria a resposta de Jó a este sofrimento e sabia que ele nunca o abandonaria por isso permitiu a Satanás tenta-lo com esta intensidade. O nome de Deus foi glorificado e Satanás foi envergonhado.

Quando Deus nos permite o sofrimento há três principais razões: Para moldar nosso caráter, para provar nossa fé ou para glorificar o Seu nome. E todas estas razões são justas.

A verdade é que quando “não temos nada” somos capazes de corresponder ao amor de Deus de maneira fidedigna. Pelo o que Ele é e não pelo o que Ele nos dá. Porque Ele nos ama assim, pelo que somos e não pelo que damos a Ele. A realidade é que servir a Deus deve ser uma resposta ao sincero amor que temos por Ele, como Deus nos dá muitas coisas pelo incondicional amor que Ele tem por nós, porque Sua misericórdia dura para sempre.

Depois de haver perdido tudo, Jó continuou sendo uma pessoa próspera, porque seu coração não mudou em relação a Deus, ele sabia quem era Deus e quem ele era. Ele não pecou e permaneceu sendo “irrepreensível, íntegro, homem que teme a Deus e evita o mal”.
Suas palavras ao final de tudo foram: Então Jó respondeu ao Senhor: Sei que podes fazer todas as coisas; nenhum dos teus planos pode ser frustrado. Tu perguntaste: “Quem é esse que obscurece o meu conselho sem conhecimento?” Certo é que falei de coisas que eu não entendia, coisas tão maravilhosas que eu não poderia saber. Tu disseste: “Agora escute, e eu falarei; vou fazer-lhe perguntas, e você me responderá”. Meus ouvidos já tinham ouvido a teu respeito, mas agora os meus olhos te viram. Por isso menosprezo a mim mesmo e me arrependo no pó e na cinza (Jó 42: 1-6).

Naquele fevereiro eu fui reprovada na minha prova de fé, eu passei um pouco mais de uma ano para compreender o propósito de Deus para mim com aquele terremoto. Eu não pude ser como Jó, porque eu não tinha meu coração no lugar correto, para mim Deus era o Gênio da Lâmpada, o meu amuleto da sorte. Quando cheguei aqui ao Peru Deus me deu a oportunidade de reavaliar minhas prioridades. Foi justo quando eu perdi toda a segurança que minha família, minha igreja, minha cidade e minha língua me davam eu pude aprender a amar a Deus da forma como Ele queria que eu o amasse. E depois da lição, vem a prova para avaliar a aplicabilidade do que aprendi. Veio a perda do meu primeiro filho, foi um novo terremoto na minha vida e apesar de toda a dor, dúvidas, medos e tentações que eu passei meu coração permaneceu próspero. Eu decidi permanecer em Deus, meu corpo sofreu grandemente, mas enquanto meu coração e meu corpo sofriam, meu espírito se fortaleceu.

Jesus nunca prometeu a ausência de problemas e sofrimentos, pelo contrário, veja o que Ele diz em Sua palavra:
João 16:33 - “Eu lhes disse essas coisas para que em mim vocês tenham paz. Neste mundo vocês terão aflições; contudo, tenham ânimo! Eu venci o mundo”.
Mateus 5:11,12 - Bem-aventurados serão vocês quando, por minha causa, os insultarem, os perseguirem e levantarem todo tipo de calúnia contra vocês. Alegrem-se e regozijem-se, porque grande é a sua recompensa nos céus, pois da mesma forma perseguiram os profetas que viveram antes de vocês.
Tiago 1:2-4 - Meus irmãos considerem motivo de grande alegria o fato de passarem por diversas provações, pois vocês sabem que a prova da sua fé produz perseverança. E a perseverança deve ter ação completa, a fim de que vocês sejam maduros e íntegros, sem lhes faltar coisa alguma.

Depois da prova Jó recebeu o dobro de coisas que tinha antes. Ele voltou a ser próspero? NÃO! Ele durante o sofrimento deleitou-se no Senhor e depois recebeu o que seu coração desejava. Deus deu a ele o que quis dar, na medida que quis dar. Deus tem prazer e alegria de dar-nos coisas, nós é que confundimos nossos desejos pessoais com a vontade soberana de Deus. Uma coisa não tem nada a ver com a outra. Viver baixo a vontade de Deus é buscar a guia através de Sua Palavra e cumprir Seus propósitos, não é ser rico, cheio de saúde e livre de problemas. Quando nos satisfazemos com os planos de Deus para nós sentimos gozo nas coisas que realizamos mesmo que seja algo oposto ao que nós mesmos planejamos pra nós.

Eu nunca planejei ser professora, recusava essa ideia com todas minhas forças, mas hoje eu dou minhas aulas com o maior amor, meus alunos sabem que eu não faço pelo dinheiro (até porque não ganho quase nada) e ainda assim dou o meu melhor. Missões era o último ministério em que desejei servir a Deus e hoje nada me dá mais alegria que estar aqui no Perú realizando esse sonho de Deus.

Avalie seu coração e se pergunte qual é a verdadeira motivação, o motor, que faz você viver. Se sua resposta foi sua família, seus filhos, seus sonhos, te digo que são respostas muito bonitas, mas não é a resposta mais adequada para um autêntico filho de Deus. Peça de Deus um coração de Jó. A Bíblia diz que nós não temos as coisas porque não pedimos e quando pedimos, pedimos com o propósito errado.

Tiago 4:1-3 - De onde vêm as guerras e contendas que há entre vocês? Não vêm das paixões que guerreiam dentro de vocês? Vocês cobiçam coisas, e não as têm; matam e invejam, mas não conseguem obter o que desejam. Vocês vivem a lutar e a fazer guerras. Não têm, porque não pedem. Quando pedem, não recebem, pois pedem por motivos errados, para gastar em seus prazeres.

A nossa motivação ao despertar cada manhã deve ser agradar a Deus ao máximo possível. No meu tratar com minha família, na criação dos meus filhos, no modificar meus sonhos para viver os sonhos de Deus, no praticar da minha carreira, etc, etc, etc.

Espero que você aprenda a amar Deus pelo o que Ele é e não pelo que ele dá. E não tenha medo das provas que virão para te moldar nesta área. Deus não nos permite provações que não suportamos. E lembre-se que o final delas é cheio de glória.

Em Jesus eu amo você!!!!

Pra terminar duas musiquinhas para animar e motivar você, até porque faz tempo que não coloco nenhuma. Mas não deixe que sejam apenas palavras ou bonitas músicas, leve a prática!

Tiago 1:22-25 - Sejam praticantes da palavra, e não apenas ouvintes, enganando-se a si mesmos. Aquele que ouve a palavra, mas não a põe em prática, é semelhante a um homem que olha a sua face num espelho e, depois de olhar para si mesmo, sai e logo esquece a sua aparência. Mas o homem que observa atentamente a lei perfeita, que traz a liberdade, e persevera na prática dessa lei, não esquecendo o que ouviu mas praticando-o, será feliz naquilo que fizer.

Anderson Freire - Coração de Jó

PG - Meu Universo